Por Miguel
Díaz de Sandi, PMP,
CSM
Amadeus es el nombre del proyecto que estamos ejecutando actualmente en SCA, el objetivo de este proyecto es lograr que los Project Managers de la empresa ejecuten de manera correcta el proceso de solicitud de nuevas inversiones conocido como CAPEX, así como la PMO y el área de contraloría puedan llevar un seguimiento adecuado de los mismos.
Díaz de Sandi, PMP,
CSM
Amadeus es el nombre del proyecto que estamos ejecutando actualmente en SCA, el objetivo de este proyecto es lograr que los Project Managers de la empresa ejecuten de manera correcta el proceso de solicitud de nuevas inversiones conocido como CAPEX, así como la PMO y el área de contraloría puedan llevar un seguimiento adecuado de los mismos.
Aunque a primera vista el proyecto parece estar dentro de nuestra área de expertise principal (PMO), en un análisis más profundo este proyecto es en esencia un proyecto de BPM (Business Process Management) liderado por el área de contraloría. El BPM es una metodología cuyo objetivo es mejorar el desempeño (Eficiencia y Eficacia) de la Organización a través de la gestión de los procesos de negocio, que se deben diseñar, modelar, organizar, documentar y optimizar de forma continua.
Para la ejecución de este proyecto utilizamos la metodología de BPM tomando los procesos actuales involucrados en la ejecución de proyectos de inversión, De acuerdo a la metodología a estos procesos les dimos un orden y flujo conforme a las necesidades descritas en las entrevistas con el personal de la institución, se definió en conjunto un manual donde se plasmó el flujo correcto del proceso, los pasos que se deben seguir, los involucrados, indicadores y puntos del control del mismo.
Este proyecto es especialmente interesante al obligarnos a ver la ejecución de proyectos desde una perspectiva del área de contraloría, lo que nos ha representado una serie de retos muy interesantes desde definir una matriz de asignación de responsabilidades distinta a la que utilizamos comúnmente (RACI) por una de uso más común por las áreas financieras de SCA (RAPID).
Como parte de la metodología BPM se debe realizar un piloto del proceso optimizado, para evaluar las mejoras logradas y ajustar el proceso utilizando la retroalimentación del personal que ejecuta el piloto. Justo en esta etapa nos encontramos evaluando todo el trabajo realizado y validando que de un valor agregado al equipo de proyecto de SCA.
Aún nos falta la transferencia del conocimiento al cliente (capacitación) para la cual hemos decidido tomar como estrategia un Rally donde podamos evaluar de manera didáctica que también han comprendido el proceso optimizado.
Este proyecto es un reto interesante y nos permite incursionar en la consultoría de proyectos desde otra perspectiva enriqueciendo la oferta que tenemos para nuestros clientes.